Nuestra propuesta en el camino del crecimiento personal es que el primer paso sea Conocerte a ti mismo.
Y esto ¿qué implica? Por un lado, que en relación a la pirámide de las necesidades, averiguar cuál es para ti, el orden de importancia de esas necesidades. Por otro lado, observar en qué fase de su cobertura sueles quedarte fijado o bloqueado y, por tanto, no se cubre la demanda y quedan como necesidades inconclusas. Esto si lo mantienes en el tiempo te genera desequilibrio, es decir, provoca numerosas tensiones que se manifestarán a varios niveles (malestar, frustración, estrés, ansiedad, enfado, etc).
Si entendemos que el ser humano, está compuesto por una parte Física, otra Emocional y otra Mental, resulta imprescindible saber cuáles son tus características, tanto tus fortalezas como tus debilidades en cada una de estas áreas. Detecta cómo son tus patrones en el actuar, el sentir y el pensar.
El conocerte a ti mismo también implica detectar cómo es tu entorno y cómo te relacionas con él, observa tu historia personal y cómo te apegas a ella.

Te sugerimos que te preguntes:

• ¿Cómo es tu relación contigo a nivel físico, emocional y mental? ¿Y con tu entorno? ¿Qué rol representas en tus relaciones?
• ¿Para qué te relacionas así contigo y con tu entorno? ¿Qué beneficios y qué contraprestaciones tiene ese comportamiento? ¿Cuál es tu motivación real y más profunda?
• ¿Estás segur@ de que el resultado obtenido, es lo que necesitas?

Emprender este camino de autoconocimiento te permitirá Aceptar lo que no puedes cambiar y Transformar lo que sí está en tu mano.